Raspado en seco: remové todos los residuos que estén sobre la mesa (harina, azúcar, residuos del horneo, entre otros).
Lavá la mesa utilizando una esponja, jabón de grado alimenticio y agua caliente idealmente para las sustancias que no se despegan con el raspado.
Desinfectá la mesa aplicando en la superficie desinfectantes de grado alimenticio, como el amonio cuaternario 200 ppm, para la eliminación de microorganismos.